Irse de vacaciones en período estival supone dejar vacía la vivienda durante varias semanas, con los riesgos que ello conlleva. Son muchos los que a la vuelta se encuentran la casa desvalijada tras haber sido forzada. Para evitar este tipo de situaciones la Ertzaintza ha realizado un llamamiento a no bajar la guardia durante estos meses de verano frente a los robos en los domicilios. Y es que, en muchas ocasiones, la imprudencia de sus moradores facilita la labor de los cacos. Por ello, la Policía vasca ha recordado que establecer una serie de medidas de prevención básicas y seguir unas pautas sencillas son la clave para "mejorar sensiblemente la seguridad de los domicilios frente a estos delitos".
Este tipo de robos afectan a muchas personas. No en vano, a lo largo de los meses de julio y agosto del año pasado, la Ertzaintza investigó un total de 481 denuncias por sustracciones en viviendas, y puso a disposición judicial a un total de 51 delincuentes, en gran parte ladrones especializados, autores de numerosos asaltos a viviendas y englobados en bandas itinerantes con infraestructuras consolidadas en diferentes lugares del Estado, según ha señalado el Departamento vasco de Seguridad.
El 'modus operandi' de estos grupos presenta una serie de características que se repiten de forma habitual. Así, colocan una pequeña 'pestaña' en la puerta de acceso a la vivienda. Lo hacen para poder detectar si se cae al abrir la puerta y saber así si la vivienda está habitada a lo largo de esos días o no. Si la pestaña sigue en su sitio varios días después proceden a la manipulación de la cerradura, sin necesidad de forzarla, y abren la puerta. Acto seguido, registran minuciosamente toda la casa, quedando tras el asalto en total desorden. Los efectos sustraídos son mayoritariamente dinero en efectivo y joyas, pero también pequeños aparatos electrónicos, máquinas de fotos y similares.
Por tanto, ante las vacaciones estivales, la Ertzaintza pide ser conscientes de esta realidad y seguir una serie de pautas que puedan ayudar a prevenir los robos en viviendas. Como norma básica hay que asegurarse siempre de cerrar con llave y con doble vuelta las cerraduras de acceso al domicilio. Por supuesto, es importante tener cerraduras modernas que ofrezcan garantías de seguridad suficientes. Además, hay que revisar el marco de la puerta regularmente para detectar la posible colocación de 'pestañas' y, si se detectan, avisar de inmediato a la Ertzaintza. También conviene retirar el correo y la publicidad de los buzones con regularidad, así como utilizar dispositivos que den apariencia de que la vivienda está habitada, como luces inteligentes que se puedan programar.
Asimismo, ayuda organizarse con personas de confianza para que, con cierta frecuencia, visiten el domicilio y revisen su estado. Otro punto muy importante consiste en no comentar públicamente, redes sociales incluidas, cuándo se va a estar ausente del domicilio, evitando dejar mensajes en el contestador en ese sentido. Además, si existen andamios anexos al inmueble hay que cerrar bien las ventanas y las persianas. Si se detecta la presencia de personas sospechosas en el interior de los portales o en sus cercanías, hay que llamar de inmediato a la Ertzaintza, al 112. Finalmente, en caso de sufrir un robo, no hay que tocar nada ni ordenar la vivienda.
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En julio y agosto del año pasado la Ertzaintza investigó 481 denuncias por robos en viviendas y detuvo a 51 delincuentes. |
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