martes, 21 de abril de 2015

Las cuentas

Más tarde o más temprano todo el mundo tiene que rendir cuentas de su actividad económica: cualquier ciudadano, consigo mismo y con la Hacienda correspondiente, y también los Estados, en nuestro caso con la UE. Eurostat, la oficina estadística europea, ha validado este martes las cuentas públicas de los miembros de la Unión correspondientes a 2014. El resultado indica que España terminó el año con un déficit del 5,7%, sin contar las ayudas a la banca, que sumarían un 0,1% más. El año precedente el desfase fue del 6,6%. Aun con la bajada señalada, el déficit español es el segundo más alto de la UE, sólo superado por Chipre (-8,8%). Países con muy graves problemas, como Grecia, o que fueron rescatados en su momento, como Portugal e Irlanda, presentan mejores balances. Tras España se sitúan en el ranking de los incumplidores Croacia y Reino Unido (-5,7%), Eslovenia (-4,9%), Portugal (-4,5%), Irlanda (-4,1%), Francia (-4%) y Grecia (-3,5%).   
Resulta fundamental contextualizar la cifra de España: se sitúa por debajo del objetivo que le había impuesto la UE, que era del 5,8% para 2014, aunque está dos décimas por encima de la meta que se había autoimpuesto el propio presidente del Gobierno, Mariano Rajoy. Tomando como referencia sólo la eurozona, el déficit público bajó del 2,9% de media del 2013 al 2,4% del año pasado, mientras que en el conjunto de la Unión la oscilación a la baja pasó del 3,2% al 2,9%.
Por otra parte, en base a las cifras dadas por buenas por la mencionada agencia, el nivel de deuda pública en España aumentó desde el 92,1% del 2013 al 97,7% del año siguiente. En consecuencia, ya se eleva hasta los 1,033 billones de euros. De igual manera, la media de la deuda aumentó tanto en la eurozona como en toda la UE, aunque lo hizo en una proporción mucho más moderada. Estonia es la que presentaba el menor ratio de deuda pública en relación a su PIB al cierre de 2014, con un 10,6%, mientras que en el otro extremo se situó Grecia, con un 177,1%. El gasto público en la eurozona fue el año pasado del 49% del PIB, 43,6% en el caso español, y los ingresos públicos se fijaron en el 46,6%, con un 37,% a nivel estatal.

La Unión Europea, y por tanto también la eurozona, afrontan un momento trascendental desde el punto de vista económico, el de la definitiva superación de la gran crisis económica del último lustro y medio. Precisamente, este lunes se dio a conocer que España no recuperará hasta 2017 la riqueza perdida durante el periodo de recesión. El FMI se muestra temeroso de que la incipiente recuperación española se frene en 2016 y, en cualquier caso, sólo Portugal, Eslovenia, Finlandia, Italia y Grecia tardarán más en restablecer su nivel anterior a la crisis. Es, pues, un periodo de esperanza, de expectativas positivas fundadas, pero también de cierta incertidumbre, con una recuperación de bases aún endebles y de avances reversibles.

0 comentarios :

Publicar un comentario

Gracias por enviarnos tus comentarios. Si cumplen con nuestras normas se publicarán en nuestro blog.

 
prestashop themes