Como los medios de comunicación nos han tenido al día por demás con lo que ha pasado en los campos de fútbol brasileños durante los casi 30 días que ha durado el campeonato, éste puede ser un buen momento para repasar lo que ha ocurrido fuera de las canchas, y no hablo de las protestas sociales en aquel país, asunto del que también se han ocupado profusamente los medios.
Hablo de cómo han salido a la luz acusaciones muy fundadas de corrupción contra la FIFA y de cómo los grandes patrocinadores del evento han salido inmediatamente a la palestra a pedir explicaciones en un gesto que habla del temor de las grandes multinacionales a verse envueltas en casos de corrupción en unos tiempos en los que esta palabra, junto a la de “transparencia”, salpica indiscriminadamente a empresas, instituciones, gobiernos, etc. También se habla estos días del simbolismo del parapléjico realizando el saque inicial del primer partido auxiliado por un exoesqueleto, y del “detalle” de la organización instalando asientos especiales para personas con sobrepeso.
De lo que se habla menos aunque me parece un gesto ejemplar es de la actitud de los aficionados japoneses que, tras el partido (que perdieron) de su selección con la de Ghana, se dedicaron a recoger la basura del estadio.
Asunto que no acaba de solucionarse es el de los gritos racistas y homofóbicos desde las tribunas de cualquier campo del mundo. También en el mundial de Brasil, donde los aficionados mexicanos dieron la nota en este sentido. Se habla también de la presencia de mujeres en los campos de fútbol (en constante aumento); y de la casualidad de que tres de los cuatro países semifinalistas (Alemania, Argentina y Brasil) estén gobernados por mujeres; y de la no tan casual proliferación de mensajes sexistas en la televisión a lo largo del campeonato.
Por supuesto, se habla de juego sucio y de entradas malintencionadas. Y de la fea costumbre de aficionados y medios de comunicación de burlarse de los perdedores. Hablo de burlarse sobrepasando los límites del mal gusto y aludiendo a los tópicos más faltones y menos favorecedores que cada país carga a sus espaldas le guste o no.
0 comentarios :
Publicar un comentario
Gracias por enviarnos tus comentarios. Si cumplen con nuestras normas se publicarán en nuestro blog.